Los daños que pueda producirse en ellos es muy importante, ya que constituyen una de las causas más frecuentes de incapacidad visual, con serias consecuencias laborales, económicas y sociales; principalmente en personas jóvenes y trabajadores.
Es de vital importancia tener siempre presente que estos traumatismos requieren:
• tratamiento inmediato, en los primeros minutos, como en las quemaduras.
• tratamiento urgente, en las primeras horas, como por ejemplo en las heridas.
• tratamiento semiurgente, donde puede esperarse varias horas, como en las contusiones.
Cuerpos extraños
Los cuerpos extraños pueden ubicarse en la superficie del ojo o penetrar y quedar dentro del mismo.
Los superficiales se ubican más frecuentemente debajo del párpado superior, provocando desde molestias y lagrimeo hasta dolor y rechazo a la luz. Para la extracción del cuerpo extraño, luego de la instilación de un anestésico superficial, se evierte el párpado superior y se procede a la extracción con un isopo de algodón.
Los cuerpos extraños que han penetrado dentro del ojo son tolerados de acuerdo con su composición química, los de vidrio o plástico duro no desencadenan una gran reacción inflamatoria. Los metales, al descomponerse químicamente, producen una reacción tóxica sobre el ojo; el cobre y el hierro son los más agresivos. En estos casos, la persona debe ser derivada inmediatamente al oftalmólogo para su tratamiento, el cual será más efectivo cuanto más precoz sea. Contusiones
Son traumatismos bastante frecuentes, principalmente en algunas actividades laborales y deportivas.
Los párpados pueden hincharse y presentar hematomas, lo que dificulta la apertura de los mismos. Los ojos pueden estar rojos, con lagrimeo y rechazo a la luz. También puede producirse una hemorragia dentro del ojo, desencadenando una rápida pérdida de la visión.
El tratamiento consiste en reposo absoluto, con la cabeza sobre-elevada a 45 grados y medicamentos que disminuyan la presión dentro del ojo. Quemaduras
Representan un grupo de alteraciones bastante frecuentes, sobre todo en la industria. Son muy importantes por las graves secuelas que pueden dejar en las personas.
Los agentes capaces de producir las quemaduras pueden dividirse en: agentes físicos y agentes químicos.
Los agentes físicos más comunes son la radiación ultravioleta, provocada por la luz solar, la soldadura autógena o la lampara de cuarzo; la radiación infrarroja, al observar un eclipse solar sin la adecuada protección; por agentes térmicos y por radiaciones ionizantes. En la mayoría de los casos aparece un intenso dolor, rechazo a la luz, ojo rojo y lagrimeo.
Entre los agentes químicos encontramos los ácidos. La quemadura es provocada por ejemplo por la explosión de una batería. Los álcalis, como la "cal viva" producen lesiones muy graves. En estas lesiones debe actuarse rápidamente, ya que es una emergencia médica. Debe lavarse con abundante agua corriente en el mismo lugar del accidente. Posteriormente, en un servicio de emergencia y previa anestesia local, se continúa con el lavado con solución fisiológica durante media hora. El dolor se alivia con medicamentos locales y finalmente se ocluye el ojo con pomadas con antibióticos. 2005
